Olé, vivan los... los "relojes".
Lililí-lololilo-lolilo,
liloló-lololí-lololí,
lilolilo-lolilo-lolilo,
lililí-lililí-lililó.
El que viva en el año 2000
verá con asombro
los tiempos cambiados
No hará falta ningún albañil
por haber goteras y en algún tejado,
las niñeras serán suprimidas
porque los chiquillos ya vendrán criados
y en el parque y en las avenidas
ya no las veremos con tantos soldados,
los políticos no tendrán vida
porque ya el Congreso estará derribado,
y cualquiera que una cosa pida
y en estos momentos lo tiene aprobado.
Los serenos se darán el piro
porque ya las casas no tendrán portal,
y cualquiera tendrá un autogiro
con una azotea para aterrizar,
los borricos, los patos y los bueyes
por encima del agua podrán galopar,
pero a mí se me aflojan los muelles
y con vuestro permiso me voy a acostar,
y que acaben los politicastros
diciendo pamplinas con sus embajadas,
porque a mí eso me importa un pepino
que al año 2000 yo no pienso llegar.
Ole, vamos al año 3000.
El que viva en el año 3000
verá sin asombro la Tierra cuadrada
En los hombres, mujeres y niños
no habrá estos follones para trabajar,
las cavernas serán habitadas
por hombres con cuernos
que sepan ladrar,
esperando que pasen mil años,
estudiando la forma de poder hablar,
y que vengan las guerras de siempre,
porque sin las guerras no pueden pasar,
y estaremos lo mismo que ahora,
y éste es el cuento de nunca acabar.
En el año 3000 las mujeres
tendrán cuatro tetas y un rabo detrás,
y los hombres serán mariquitas
y con ese rabo podrán disfrutar,
habrá un macho para cien mujeres
y para que los niños se puedan criar,
pero el macho les durará menos
que una gallina en un hospital,
los cabritos, los guarros, los bueyes
serán del tamaño de una catedral,
y los barcos desaparecieron
porque como digo, la Tierra es cuadrada
