Campaña cultural

Parodia del año 1975

Señores, buenas tardes.¡Eh!. Gracias...Muchas gracias.
Sus he reunido en esta cuadra de Eulalio, por ser el lugar más grande del pueblo, ya que donde caben trescientos mulos y borricos, cabemos todos.
El motivo de esta reunión es para hacer una campaña de analfabetos, no como decía el Tomaso, compañía de analfabetos.
Pues porque en ese caso, en vez de compañía sería en el pueblo y habría que poner un regimiento.
Os he reunido también para que seáis menos palurdos,y para cuando un turista os pregunte que dónde están los monumentos, no le digáis que están todos en el campo trabajando. Monumento es una cosa de piedra, como el abrevadero del pueblo, pero con gente encima.
Monumento no es ninguna gachí buena.
Hoy sus voy a hablar yo, otro día sus hablará el señor maestro, otro día el señor veterinario.
Y así, así, sus hablaremos los intelectuales, que no tiene nada que ver con la tele, para que sepáis, y para que seáis menos bestias.
Y aprendáis cosas de provecho y no apedreéis, y no apedreéis a los turistas por eso de los pelos largos, que son gente que, en vez de dinero, ¡traen divisas!
Que es una moneda extranjera que sirve para comprar whisky y tractores.
Eustaquio, cierra la puerta.
Señor alcalde.
Dime.
Te voy a hacer una pregunta, hombre, que es que me la escrito la parienta,
y le iba a preguntar, eh,
¿qué se pone?...¿21 de Murcia o 21 de Marzo?
¡21 de Murcia, bestia!
¡Viva el señor alcalde! ¡Viva!
Silencio.
Ya sé que sabéis mucho por la tele...
Aquí no se suena uno la nariz, hombre, váyase usted a su casa.
¿Qué animales!. ¡Qué cabezotas!
Bueno, vamos a seguir que cuesta un trabajo esto como poner un cohete en la luna.
Vamos a ver...
Señor alcalde, ¿por qué, por qué no se presenta usted para eso del millón para el mejor?
A su debido tiempo.
No me presento porque hay mucha envidia en el mundo. Bueno, dejarme hablar ya, que yo termine, que tengo yo ahora también que darle de comer a mis cochinos.
Ustéd perdone.
Ya sé que sabéis mucho por la tele, porque hay cuatro o cinco en el pueblo, pero hay cosas que no... no sabéis explicar.
Para eso está vuestro alcalde, que sus explicará poco a poco todas esas cosas y subáis de cultura.
También, aunque no sabéis leer, llegan al pueblo esos periódicos que son papeles que llevan cosas dentro para enterarnos de todo lo que pasa en el mundo, como El Caso y La Codorniz.
Y como los leemos los intelectuales sus enteráis todos.
Y así, con estas campañas culturales que habemos inventado, pues vais a saber más.
Por ejemplo, todos habéis oído hablar de la bomba atómica, que es una cosa muy mala, que explota en el pueblo de al lado y nos coge a todos los de aquí. Bueno, eso se llama la reacción en cadena, pero si sus explico esto científicamente, sus vais a quedar como yo cuando me lo contaron, así que os lo explicaré de otra manera y de otra forma, para que vosotros se lo expliquéis a los del pueblo de la lado y que digan que vosotros sabéis más que Lepe y que ellos.
Eso es... bueno... pues atender bien.
Eso de la reacción en cadena, que hace que la bomba esa sea tan malísima, es como...A ver, a ver qué se me ocurre, veremos a ver... Ya está, para que sus enteréis bien:
Es como si yo a las doce de la noche en mi casa, me levanto de la cama y me zampo un litro de aceite de ricino y le doy un trago a tos los del pueblo, ¿sus habéis enterado ya?.
¡Silencio! ¡Silencio!
Así que mañana os seguiré explicando más cosillas de éstas sin importancia.
Así que ahora a trabajar y buenas tardes.